LA TERCERA – La macro zona central (RM, Valparaíso-Viña, San Antonio y Rancagua) es la que más aporta a la economía. Adicionalmente, un producto exportado incluye en sus costos un 20% por logística. Bajo esta consideración, la conectividad es de la mayor importancia. Valorando que un privado presente un proyecto ferroviario, modo de escasa presencia y bajo apoyo político, su adjudicación cuenta con dos vías:
Ley de EFE: Un artículo de 1931 (nunca utilizado) le permite al Presidente, vía decreto, asignar sin licitación ni condiciones previas, salvo las que se fijen en el propio decreto.
Concesiones-MOP: Mecanismo que requiere presentar la idea, que se declara de interés público. Con esto, el MOP solicita al privado la elaboración del anteproyecto y modelo financiero. Luego, concesiones llama a una licitación pública y abierta. El proponente original tiene un puntaje (+5%) y además, si no gana, sus gastos le son reembolsados. En la adjudicación habría que considerar que EFE ha efectuado limitadas concesiones al entregar la mantención de la infraestructura.
EFE no cuenta con competencias para efectuar el diseño, licitación y actuar como contraparte dada la magnitud del proyecto. Utilizar la Ley EFE se aleja de la norma de un Estado moderno y constituye un acto unilateral y arbitrario.
Utilizar el mecanismo de concesiones valida el proyecto, asegura una ejecución con riesgos acotados y abre un proceso competitivo donde las empresas participantes lo hacen en base a tarifas al público, tiempos de recorrido, niveles de confort y servicios, tecnologías, impactos urbanos y otros que se definan de interés.
Que un privado proponga un proyecto de este tipo pone un serio aviso sobre la falta de capacidad de anticipación y visión del Estado en su obligación de cuidar el desarrollo para la logística, la gente y el crecimiento del país.
Fuente: La Tercera, Viernes 01 de junio de 2018
