EL MOSTRADOR – De acuerdo al Barómetro de la Banda Ancha Social de la Subtel, 23 comunas del país registran cifras alarmantes de conectividad, y muchas de ellas se ubican en zonas rurales. La mayoría presenta bajos indicadores en variables como acceso a redes, ingreso per cápita, competencia de operadores de telecomunicaciones, redes de alta velocidad y crecimiento de los últimos seis meses, además de otros propios de la vulnerabilidad social.
Son diversos los impactos que genera en las comunidades la falta de conectividad, especialmente tras la irrupción de la pandemia. En un plano más concreto e inmediato, la brecha digital es una barrera al estudio, limita el acceso al conocimiento y acentúa las diferencias sociales, ya que el analfabetismo digital disminuye las opciones de encontrar trabajo o de acceder a un empleo de calidad.
La brecha no sólo acrecienta la sensación de segregación, sino que también la de aislamiento y asimetría en el acceso a oportunidades de todo tipo. En un mundo que está digitalizando la mayor parte de sus actividades y navega con facilidad en esta nueva realidad híbrida, las tecnologías digitales y los flujos de datos a gran escala han cambiado sustantivamente cómo viven y trabajan las personas, cómo interactúan entre ellas, y cómo se relacionan con el Estado. Si hubiera alguna mínima duda sobre el impacto de las tecnologías de información y comunicaciones e Internet en el bienestar integral de las personas, claramente la crisis sanitaria nos demostró el rol esencial que éstas tienen en el desarrollo social.
De ahí que existe total consenso en la urgencia de avanzar con rapidez en desarrollar las inversiones necesarias para evitar que las diferencias en conectividad sigan profundizándose, y así lograr incorporar más y más personas a la era digital.
Entre 2020 y octubre de 2021, se extendieron 4.425 kilómetros de red de fibra óptica (FTTH) en 51 comunas del norte, centro y sur del país, pasando por distintas localidades, muchas de las cuales figuran en el barómetro de la banda ancha de Subtel, con altos niveles de vulnerabilidad digital.
Durante la pandemia, VTR decidió poner en marcha el plan de construcción de infraestructura más importante de los últimos 10 años, asumiendo el cambio estructural en el consumo de servicios de datos, y la necesidad de seguir ampliando la cobertura de banda ancha con tecnología de punto a distintos rincones del país.
El plan 2021 contempló la instalación de 400 mil nuevos home passes en comunas como Vicuña, Vallenar, Tomé, Lota, Victoria, Parral, Hijuelas y Nacimiento, entre otras, con una oferta de fibra óptica simétrica de alta velocidad de 200, 300 y 600 megas, HubTV, Netgen Wifi, VTR+ y televisión de última generación con control inteligente y sistema de búsqueda por voz.
El gerente general de la compañía, Vivek Khemka, explica que “ampliar la red de fibra óptica en todo Chile constituye un salto importante en el desafío-país de seguir reduciendo la brecha digital e integrando a más personas a los beneficios y oportunidades que abre esta nueva era que estamos viviendo”. El ejecutivo destacó, además, el despliegue tecnológico y humano que ha hecho posible alcanzar estos objetivos. “En cada comuna a la que nos estamos expandiendo, hemos requerido de cuadrillas de entre 30 y 100 técnicos especializados, que utilizan tecnología de punta para el tendido de los cables y la fusión de los casi 200 filamentos que deben ser unidos, uno a uno, en cada red”.
Fuente: El Mostrador, Viernes 26 de Noviembre de 2021
