DIARIO FINANCIERO – La fuerte caída del IMACEC de octubre movió al gobierno a anunciar un plan “pro reactivación” por más de US$ 3.000 millones en nueva inversión que debiera contener, de alguna manera, la caída en la actividad y el empleo.
El hecho de que esta se localice en infraestructura representa una oportunidad adicional, en la medida que se opte por buenos proyectos. La infraestructura no sólo es una manera de activar la economía al momento de su ejecución, sino también de generar nuevas oportunidades. Es valorable el anuncio de más de US$ 850 millones que se destinarán a reconstrucción y los US$ 480 millones en inversión regional, entre otros.
El rol que de este modo pasa a cumplir el Estado es fundamental y cambia radicalmente la pasividad con que se había enfrentado el déficit de crecimiento que vive el país en los últimos años. La inversión pública es insustituible para reactivar, pero también es una señal para el sector privado del compromiso público por el desarrollo.
Es muy probable que el gobierno se vea interpelado en poco tiempo más a llevar a cabo un segundo plan de reactivación. Si se mantiene en la misma línea, es posible suponer que seremos capaces de soslayar en buena medida la crisis a la que nos vemos enfrentados.
Carlos Cruz L.
Director Ejecutivo
Consejo de Políticas de Infraestructura (CPI)
Ver artículo
Fuente: Diario Financiero, Miércoles 04 de Diciembre de 2019
Reactivación e infraestructura, por Carlos Cruz
DIARIO FINANCIERO – La fuerte caída del IMACEC de octubre movió al gobierno a anunciar un plan “pro reactivación” por más de US$ 3.000 millones en nueva inversión que debiera contener, de alguna manera, la caída en la actividad y el empleo.
El hecho de que esta se localice en infraestructura representa una oportunidad adicional, en la medida que se opte por buenos proyectos. La infraestructura no sólo es una manera de activar la economía al momento de su ejecución, sino también de generar nuevas oportunidades. Es valorable el anuncio de más de US$ 850 millones que se destinarán a reconstrucción y los US$ 480 millones en inversión regional, entre otros.
El rol que de este modo pasa a cumplir el Estado es fundamental y cambia radicalmente la pasividad con que se había enfrentado el déficit de crecimiento que vive el país en los últimos años. La inversión pública es insustituible para reactivar, pero también es una señal para el sector privado del compromiso público por el desarrollo.
Es muy probable que el gobierno se vea interpelado en poco tiempo más a llevar a cabo un segundo plan de reactivación. Si se mantiene en la misma línea, es posible suponer que seremos capaces de soslayar en buena medida la crisis a la que nos vemos enfrentados.
Carlos Cruz L.
Director Ejecutivo
Consejo de Políticas de Infraestructura (CPI)
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Fuente: Diario Financiero, Miércoles 04 de Diciembre de 2019