LA PRENSA AUSTRAL – “Es tal la fama de rigurosidad que tienen los ingenieros chilenos, que en otros países nos dicen: ‘Ustedes son de otro nivel’. Sin embargo, existe un desafío y es ver cómo enlazar el aspecto ingenieril con los ámbitos académico y empresarial, de forma tal que avancemos hacia una desburocratización que facilite la ejecución de proyectos”.
Así planteó el presidente del Colegio de Ingenieros de Chile, Arturo Gana de Landa, en visita a Punta Arenas, la necesidad de que el país incorpore mecanismos que permitan agilizar y dar certidumbre a quienes impulsan emprendimientos o grandes obras, a la hora de efectuar los trámites respectivos de autorización.
Y es que para el ingeniero comercial de la Universidad Católica no sólo es cotidiano encontrar ‘peros’ cuando se gestionan permisos a nivel municipal para obras de infraestructura, sino que también los inconvenientes o imponderables se dan en prácticamente todos los quehaceres de la sociedad. “En la medida que el mundo avanza, te van poniendo cada vez más reglas que se repiten incluso hasta dos o tres veces. Y a nivel nacional es cosa de ver que tanto los emprendimientos como las mismas empresas ya formadas se ven enfrentadas permanentemente a una cantidad de normas impresionante, que dificultan el impulso a cualquiera que desee hacer algo. De hecho, nuestro país ha perdido inversionistas por la cantidad excesiva de burocracia que tenemos en algunos ámbitos y el caso más reciente está en una empresa de renombre mundial -alusión es a Huawei- que quería instalar su avanzadísima electrónica en nuestro país y, por las tramitaciones que ello involucraba, no lo hizo”.
En este contexto, el profesional que también es parte del directorio de Metro S.A. remarcó que se torna primordial que existan certezas. “No se saca nada con tener una buena materia prima nacional, si por otro lado tanta tramitación genera incertidumbre. Por dar un ejemplo, si un director de obras aprobó un certificado de construcción hace 5 años, se debe respetar y no venir después de ese periodo a decir que fue mal otorgado”, recalcó.
Consulta a colegiados
Pero no sólo de tramitaciones y burocracia habló el presidente de los colegiados. De igual modo se refirió a lo relevante que puede llegar a ser la opinión de los colegiados ingenieriles para el desarrollo de grandes obras, pero que en la práctica poco se les pide, como sucedió con la emblemática conformación de la propuesta del Centro Antártico Internacional. “La infraestructura tiene que ir en progreso, con una debida cautela. El punto es que ante este tipo de iniciativas como de otras, no siempre se le consulta al Colegio de Ingenieros, que tiene su visión de qué es lo mejor para la zona y en cuánto tiempo conviene desarrollar dicha idea, considerando las limitaciones presupuestarias. “Si vemos el caso del Centro Antártico Internacional, nos encontramos con que si bien reviste una alta inversión, es una obra de la cual Chile no puede marginarse. Lo que ocurre es que el proyecto hay que estudiarlo para definir el tamaño y otras variantes técnicas para ver cómo llevarlo a cabo. Pero que hay que tenerlo, es un hecho”.
Arturo Gana de Landa preside el Colegio de Ingenieros desde agosto de 2018 y esta semana, como parte de sus actividades planificadas para el presente año, encabezó en nuestra ciudad la presentación de la Agenda de la Ingeniería 2019, ello en el marco de un nuevo encuentro nacional de Consejos Zonales, instancia en la que 12 presidentes colegiados de regiones del país tocaron diversos temas relativos a infraestructura y otras materias afines a la actividad. De igual modo, conocieron a través de distintas ponencias, los detalles del quehacer de Enap, Mina Invierno, Methanex y Cámara Chilena de la Construcción.
Fuente: La Prensa Austral, domingo 5 de Mayo de 2019
