LA TERCERA – Mientras lamentamos la pérdida del Museo Violeta Parra y otros espacios culturales destruidos por el estallido o postergados por la pandemia, con esperanza y admiración celebramos el impulso de una creciente filantropía que se levanta contra el pesimismo.
Tal es el caso del Nuevo Museo de Santiago NuMU, que busca convertirse en un referente para el arte contemporáneo en Chile y el mundo. Ubicado en el sector sur poniente del Parque Bicentenario, en Vitacura, tanto el edificio como su colección serán financiados y gestionados por la Fundación para el Arte y la Cultura Claudio Engel e Hijos. Se trata de una de las colecciones de arte contemporáneo más importantes de Chile y Latinoamérica, con más de 900 obras creadas por cerca de 140 artistas como Alfredo Jaar, Eugenio Dittborn, Lotty Rosenfeld y Paz Errázuriz, junto a artistas emergentes chilenos como internacionales, abarcando distintas épocas y formatos.
La iniciativa data de antes del estallido, cuando la fundación se adjudicó la concesión para construir y operar un museo en el parque Bicentenario por un período de 40 años. El 2020 la fundación y Vitacura convocan a un Concurso Nacional de Arquitectura, donde entre 76 propuestas se selecciona la de Cristián Fernández Eyzaguirre, arquitecto del GAM y Teleférico Bicentenario entre otras grandes obras.
Luego de un tiempo sin conocer avances, en agosto pasado la Seremi de Vivienda y Urbanismo aprobó el informe definitivo de la construcción, también el Estudio de Impacto sobre el Sistema de Transporte Urbano y el Informe de Mitigación de Impacto Vial. Recientemente, se ingresó el expediente de Obra Nueva a la Dirección de Obras Municipales de Vitacura. Queda pendiente solo este último permiso para iniciar las obras.
Lamentablemente, el proyecto no ha estado exento de críticas. Las principales vienen de vecinos, académicos y activistas medioambientales, quienes cuestionan el eventual impacto vial, falta de participación, o que un espacio cultural de este tipo se construya dentro de un parque, argumentando que podría reducir áreas verdes o alterar los ecosistemas. Preocupaciones legítimas, pero a destiempo. Desde el proyecto original del Parque, siempre se pensó un equipamiento metropolitano en ese sector. Los principales parques del mundo como el Central Park de Nueva York o en Berlín albergan grandes museos, lo mismo nuestro Bellas Artes en el Forestal. La cercanía con la Línea 7 de Metro dará mayor accesibilidad, permitiendo que más personas puedan disfrutar del museo usando transporte público.
En cuanto a la falta de información o participación, no existe proceso más abierto y participativo que los concursos públicos de arquitectura. Los 76 proyectos fueron expuestos por semanas en la municipalidad y siempre se estuvo abierto al diálogo, considerando además todos los permisos necesarios. En lugar de cuestionar iniciativas como estas, debemos apoyar para que proyectos tan generosos como el NuMu abran nuevas esperanzas para nuestra alicaída escena cultural.
Por Pablo Allard, decano Facultad de Arquitectura U. de Desarrollo
Fuente: La Tercera, Domingo 19 de Enero de 2025
