DIARIO FINANCIERO – El indicador de la AIC mejoró 6,4% en abril-junio comparado con el trimestre anterior y 2,4% frente al mismo lapso de 2020. Los sectores minero y energía jugaron un rol importante en la recuperación.
La inversión pareciera encaminada a consolidar en lo que resta del año la recuperación con la que cerró el primer semestre (12%). Así lo sugiere el repunte que exhibió la actividad de las empresas que reúne el gremio de consultoras de ingeniería involucradas en distintos proyectos en el país.
El indicador de la AIC, que se basa en las horas hombres demandadas en las distintas etapas que comprende el desarrollo de una obra, mejoró 6,4% en el período abril-junio en comparación con el trimestre inmediatamente anterior y 2,4% si se contrasta con el mismo lapso de 2020.
Auspicioso resultó el avance en la actividad que realizan durante la fase en que se estudia la factibilidad de una inversión, que se denomina preinversional. Mientras en doce meses subieron a un ritmo de dos dígitos, respecto a enero-marzo lo hicieron en 7,3%.
Dado esto, el índice que mide su desempeño alcanzó su mayor valor histórico.
El informe del gremio resalta que “este resultado es muy positivo”, ya que anticipa un mayor dinamismo en las siguientes etapas, que son la de ingeniería de detalle y el gerenciamiento de proyectos.
Comparado con la situación observada en el primer año de la pandemia, el repunte de los estudios lo lideró el sector de la minería (49,3%), los que además representan más de la mitad de la composición total de la demanda en esta primera etapa.
Le siguieron los requerimientos en el rubro de la infraestructura hídrica y sanitaria, que crecen 24,7%; y las obras en infraestructura general, con un 9,5%.
Los actores privados gatillaron el 89% de la actividad en esta fase inicial de la inversión.
En la misma dirección, las labores que realizan las consultoras durante la construcción de las obras también exhibieron una recuperación. El llamado gerenciamiento de proyectos, que es la etapa de mayor participación dentro de los servicios que ofrecen, volvió a su máximo valor en el índice gracias a un aumento anual de 3,7%.
En este ámbito, fueron las inciativas ligadas al rubro de la energía las que más pesaron (75,8%), secundadas por las de infraestructura urbana (36,8%).
El rezago
A diferencia de lo anterior, las consultorías de ingeniería de detalle -que es la fase intermedia entre los estudios de factibilidad y la construcción de la obra- no levantaron cabeza en el segundo trimestre. En el año cayeron 14,3% y 6,7% frente a enero-marzo.
“Los resultados negativos marcan una tendencia desde octubre 2019, interrumpidos por sólo dos trimestres con resultados positivos”, señaló el informe de la AIC.
Dentro de los sectores que explicaron este mal desempeño se identifica la merma anual en la demanda de proyectos de la industria (69,1%) e infraestructura urbana (46,2%).
Descensos que no logró compensar el alza de 14,4% que registró la minería, la cual representa el 46% de las horas en esta etapa de desarrollo.
Además, se sumó una contracción de 41,5% de las horas requeridas por iniciativas del sector público, siendo el “responsable de las caídas de la demanda de horas en ingeniería de detalle”, aseveró el reporte.
El rol de la enegía
En términos generales, lo que impulsó la actividad de las consultoras de ingeniería fueron las inversiones en energías que se desarrollan en el país.
Coherente con este dinamismo, el sector privado jugó un rol relevante en la mayor demanda de horas hombre observadas en el segundo trimestre, con un rebote de 6,3% frentea lo que ocurrió al partir el año.
Fuente: Diario Financiero, Jueves 26 de Agosto de 2021