LA TERCERA – Se podría decir que el centro cívico de Lo Espejo, comuna ubicada a 10 kilómetros del centro de Santiago, está en Av. Central. Allí hay un consultorio, la oficina del Servicio de Impuestos Internos, una notaría y una pequeña sucursal bancaria. A diferencia de las grandes comunas capitalinas, en su “distrito financiero” también hay varios carritos de sopaipillas y de café, además de algunos puestos que venden ropa de segunda mano.
La zona -llamada por sus más antiguos habitantes como el “Pueblo de Lo Espejo”, pues sus terrenos correspondían a parcelas-, es conocida como una comuna dormitorio. Muchos vecinos deben buscar trabajo fuera de sus límites, pues no tiene áreas comerciales o de servicios. Por ello, durante la mañana los paraderos de Av. Central se ven repletos de personas intentando subirse a micros del Transantiago.
“Estamos en el corazón de Santiago, pero cuando uno viene para acá parece que estuviera en provincia”, afirma Carmen Quintana, quien reside hace 35 años en la zona. Señala que movilizarse en el sector es complejo, en especial, en horas punta, pues dependen de los buses, “que se hacen pocos para llevar a tanta gente”.
Por eso, el alcalde de Lo Espejo, Miguel Bruna, afirma que el año pasado el anuncio de las nuevas líneas de Metro 7, 8, 9 e incluso la 10, no cayeron nada de bien. “No estábamos contemplados, lo que nos parece muy injusto”, reclama. El edil dice que junto al concejo comunal iniciará la campaña #MetroparaLoEspejo, con el objetivo de que esta comuna de 8 kilómetros cuadrados, rodeada de autopistas y escaso desarrollo, pueda ser parte de la red.
La idea del municipio es que se implemente una extensión de la línea 4A del Metro al poniente para llegar a la comuna, partiendo desde la estación intermodal La Cisterna (ver infografía).
El jefe comunal pidió una reunión con la ministra de Transportes, Gloria Hutt, la que está fijada para junio, para entregar la propuesta y detallar las razones por las cuales el proyecto tendría “rentabilidad social”. Aquí viven 98.804 personas y 26.744 hogares, según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), a los que les cuesta movilizarse.
La vecina de la población Lo Sierra, Johanna Toro, sostiene que los servicios del Transantiago se hacen escasos para la alta población. “Por eso, algunos optan por tomar el tren Alameda-Nos, pero no es suficiente; a veces es imposible subirse, porque va repleto”, añade.
Desarrollo
El concejal Nibaldo Ahumada (DC) sostiene que desde hace décadas se la ha propuesto la idea de tener tren subterráneo a diversas autoridades, pero Lo Espejo siempre queda fuera de los planes oficiales: “Es una comuna muy castigada, con déficit de todo tipo”, dice. Describe que no tienen mall, que solo este año llegó un banco, que no hay farmacias de grandes cadenas y que poseen solo cuatro cajeros automáticos, por lo que la comuna depende de los servicios de Maipú y San Bernardo.
Tampoco tienen un plan regulador actualizado que permita la construcción en altura, lo que impide a las inmobiliarias proponer iniciativas de más de cuatro pisos. “Esta es una zona donde los jóvenes que progresan se van, pues no hay casas nuevas de calidad donde puedan vivir”, añade la vecina de Lo Sierra.
El municipio informó que iniciará el diseño de un plan regulador nuevo este año, con el fin de que el sector privado invierta, en el caso de que pueda tener una línea de metro en el futuro. La empresa Metro no quiso pronunciarse sobre este tema.
Ver artículo
Fuente: La Tercera, Domingo 26 de Mayo de 2019
Lo Espejo, el pueblo que pide Metro
LA TERCERA – Se podría decir que el centro cívico de Lo Espejo, comuna ubicada a 10 kilómetros del centro de Santiago, está en Av. Central. Allí hay un consultorio, la oficina del Servicio de Impuestos Internos, una notaría y una pequeña sucursal bancaria. A diferencia de las grandes comunas capitalinas, en su “distrito financiero” también hay varios carritos de sopaipillas y de café, además de algunos puestos que venden ropa de segunda mano.
La zona -llamada por sus más antiguos habitantes como el “Pueblo de Lo Espejo”, pues sus terrenos correspondían a parcelas-, es conocida como una comuna dormitorio. Muchos vecinos deben buscar trabajo fuera de sus límites, pues no tiene áreas comerciales o de servicios. Por ello, durante la mañana los paraderos de Av. Central se ven repletos de personas intentando subirse a micros del Transantiago.
“Estamos en el corazón de Santiago, pero cuando uno viene para acá parece que estuviera en provincia”, afirma Carmen Quintana, quien reside hace 35 años en la zona. Señala que movilizarse en el sector es complejo, en especial, en horas punta, pues dependen de los buses, “que se hacen pocos para llevar a tanta gente”.
Por eso, el alcalde de Lo Espejo, Miguel Bruna, afirma que el año pasado el anuncio de las nuevas líneas de Metro 7, 8, 9 e incluso la 10, no cayeron nada de bien. “No estábamos contemplados, lo que nos parece muy injusto”, reclama. El edil dice que junto al concejo comunal iniciará la campaña #MetroparaLoEspejo, con el objetivo de que esta comuna de 8 kilómetros cuadrados, rodeada de autopistas y escaso desarrollo, pueda ser parte de la red.
La idea del municipio es que se implemente una extensión de la línea 4A del Metro al poniente para llegar a la comuna, partiendo desde la estación intermodal La Cisterna (ver infografía).
El jefe comunal pidió una reunión con la ministra de Transportes, Gloria Hutt, la que está fijada para junio, para entregar la propuesta y detallar las razones por las cuales el proyecto tendría “rentabilidad social”. Aquí viven 98.804 personas y 26.744 hogares, según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), a los que les cuesta movilizarse.
La vecina de la población Lo Sierra, Johanna Toro, sostiene que los servicios del Transantiago se hacen escasos para la alta población. “Por eso, algunos optan por tomar el tren Alameda-Nos, pero no es suficiente; a veces es imposible subirse, porque va repleto”, añade.
Desarrollo
El concejal Nibaldo Ahumada (DC) sostiene que desde hace décadas se la ha propuesto la idea de tener tren subterráneo a diversas autoridades, pero Lo Espejo siempre queda fuera de los planes oficiales: “Es una comuna muy castigada, con déficit de todo tipo”, dice. Describe que no tienen mall, que solo este año llegó un banco, que no hay farmacias de grandes cadenas y que poseen solo cuatro cajeros automáticos, por lo que la comuna depende de los servicios de Maipú y San Bernardo.
Tampoco tienen un plan regulador actualizado que permita la construcción en altura, lo que impide a las inmobiliarias proponer iniciativas de más de cuatro pisos. “Esta es una zona donde los jóvenes que progresan se van, pues no hay casas nuevas de calidad donde puedan vivir”, añade la vecina de Lo Sierra.
El municipio informó que iniciará el diseño de un plan regulador nuevo este año, con el fin de que el sector privado invierta, en el caso de que pueda tener una línea de metro en el futuro. La empresa Metro no quiso pronunciarse sobre este tema.
Ver artículo
Fuente: La Tercera, Domingo 26 de Mayo de 2019
