DIARIO FINANCIERO – El último reporte de las Naciones Unidas sobre cambio climático publicado en agosto pasado alertó del aumento de sequías y el derritimiento de glaciares, lo que afectará la disponibilidad de agua.
La profesora del Instituto Asiático de Tecnología de Tailandia y experta en economía y cambio climático, Joyashree Roy -quien participó en la segunda Conferencia de Evidencia Científica y Políticas Públicas organizada por el ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación y Fundación MERI- afirma que se debe construir infraestructura hídrica capaz de manejar los flujos de agua resultantes del derritimiento de glaciares o inundaciones, porque de lo contrario, el recurso se perderá.
“Esta es la década de la acción donde la infraestructura hídrica debe ser construida -puede ser para la generación de energía, para la agricultura o para el uso industrial- y ser compatible con el clima en el sentido de que deben ser capaces de manejar el gran flujo de agua, tienen que estar pensando en el almacenamiento y hacer un mejor uso de ellos para que haya menos inundaciones y otros impactos”, afirma.
-Frente a los escenarios de sequía e inundaciones, ¿Qué puede ocurrir en términos de precio y de disponibilidad de agua?
-Depende en gran medida de la infraestructura y tecnología que se tenga, del mecanismo de incentivo o de regulación del mercado que funcione, o de la política que se aplique. La política y la regulación también juegan un papel importante.
Básicamente, la cobertura de la demanda de agua dependerá en gran medida de si se utiliza tecnología hídrica para hacer más eficiente el uso de agua.
-¿La infraestructura hídrica es algo de lo que hay que preocuparse en el corto plazo?
-La construcción de infraestructuras hídricas va a ser un tema relevante y hay que considerarlo en la toma de decisiones en este momento, no sólo por los efectos del clima en la disponibilidad del recurso, sino porque es un elemento vital para lograr el desarrollo sostenible. En la pandemia, vimos que el uso del agua para la higiene y el saneamiento era muy importante. De hecho, está vinculada a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (de Naciones Unidas).
Es clave cómo se construye la infraestructura en torno al agua, que debe ser resistente al clima, pero también debe ayudar al desarrollo sostenible.
-¿A qué infraestructuras hídricas se refiere?
-Por ejemplo, a la infraestructura de riego, la infraestructura de almacenamiento de agua o a la infraestructura de generación de electricidad hidráulica. Se necesitarán embalses en muchos lugares para retener los deshielos de los glaciares en el reparto transfronterizo del agua con múltiples fines: riego, generación hidroeléctrica y agua para las industrias y otras actividades que requieren mucha agua. No deben construirse de forma indiscriminada, sino con conocimiento científico. Hay muchos embalses en el mundo que han proporcionado seguridad hídrica durante mucho tiempo.
-¿Qué sectores económicos son los que deberían invertir en infraestructura hídrica?
-La energía y el sector sanitario van de la mano. La infraestructura de agua para el flujo del servicio de agua necesita innovación tecnológica, por ejemplo, para hacer un uso más eficiente de energía. La planta de servicios de agua puede ser intensiva en consumo energético, pero se pueden incorporar diversas innovaciones tecnológicas, para que disminuir el uso de energía.
Por supuesto, el sector de la agricultura va a ser el más afectado por la sequía, y por eso tenemos que ser muy cuidadosos con la forma en que se aborda, pues es la industria que entrega seguridad alimentaria. Hay que recordar que la agricultura y el sector de la producción de alimentos es el mayor consumidor de agua a nivel mundial, casi el 86% del agua se destina al sector agrícola. Esto es algo muy importante a tener en cuenta, ya que también, si bien es el usuario más intensivo de agua, también es el que proporciona seguridad al sistema alimentario.
-¿Deberíamos hacer más fuerte la institucionalidad del agua?
-Todas estas políticas visionarias deben hacerse a nivel estatal. Pero también es necesario que el gobierno cree un incentivo para los inversionistas privados, porque el gobierno no puede financiar todo. El gobierno debe establecer la visión de largo plazo, hacia dónde quiere ir, y definir qué tipo de infraestructura e inversión se necesitará, generando los incentivos adecuados.
Pero para todo esto se requiere un acuerdo participativo con actores privados y estatales en el que también es clave involucrar a la sociedad.
Fuente: Diario Financiero, Martes 21 de Septiembre de 2021
