PULSO – Metro de Santiago ingresó a trámite en el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) un proyecto que se torna esencial para la interconexión de sus líneas. Pretende llevar a cabo un túnel subterráneo peatonal que una la actual Línea 1 con la futura Línea 7 en la concurrida estación Baquedano, en el punto central de la ciudad.
La futura Línea 7, que conectará a la comuna de Renca con la de Vitacura a contar del año 2028, incluye 19 estaciones que cubrirán 8 comunas en una extensión de 26 kilómetros. La undécima estación de este trazado será Baquedano, hoy puente de conexión con las líneas 1 y 3, por lo que los planes contemplan su ampliación hacia la ribera norte del río Mapocho, donde se edificará su acceso.
Para ello, la compañía estatal pretende construir un túnel peatonal subterráneo de 140 metros de extensión que pasará por debajo del Mapocho y que conectará la nueva estación de la Línea 7 con las actuales de la Línea 1 y Línea 3.
El nuevo acceso a la Línea 7 se emplazará en el extremo oriente del parque José Domingo Gómez Rojas, situado entre las calles Bellavista, Pío Nono y Santa María, en el límite de las comunas de Recoleta y Providencia, frente al edificio de la Escuela de Derecho de la Universidad de Chile y al sur de la Universidad San Sebastián.
El método constructivo, explicita la presentación de Metro al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), corresponde al tradicional usado por las obras de Metro, llamado New Austrian Tunnelling Method (NATM).
La compañía prevé una inversión de US$18 millones en este proyecto, aunque la Línea 7 en total contempla recursos por US$2.528 millones.
La decisión de construir este túnel y el emplazamiento de la estación por el lado norte del Mapocho se produjo luego de una extensa polémica que se suscitó entre el Metro y los vecinos del Parque Forestal, quienes, apoyados por la alcaldesa de Santiago, Irací Hassler, se opusieron a que el nuevo acceso de la estación Baquedano se realizara en el actual parque, por la probable destrucción de árboles. Asimismo, el Consejo de Monumentos Nacionales también había solicitado a la empresa un emplazamiento distinto. La controversia que duró tres años se cerró en noviembre de 2022, cuando Metro decidió no seguir adelante con su idea original y mover el acceso hacia el norte.
A julio de este año, el proyecto de Línea 7 contaba con un avance del 19%, que incluye más de 5 kilómetros de túneles excavados en sus diversos frentes de trabajo
Fuente: Pulso, Martes 01 de Octubre de 2024