DIARIO FINANCIERO – Hace un año se anunció el que sería el primer proyecto de hidrógeno verde vinculado a las redes de gas en Chile y de Latinoamérica. Se trata del proyecto “H2GN” de Gasvalpo, a través de su marca Energas, que se ubicará en el Barrio Industrial de Coquimbo, el cual inyectará el denominado combustible del futuro a su red en esa región, sustituyendo hasta un 20% del gas natural actualmente suministrado. Pero la iniciativa, cuya inversión fue de US$ 1 millón, ya empieza a ver la luz.
Gasvalpo ya está informando a sus clientes de Coquimbo y La Serena que a principios de octubre se realizará la primera inyección de hidrógeno verde a las redes de gas de distribución de gas natural de la región. La mezcla, o blending, de hidrógeno verde y gas natural se realizará en forma progresiva, comenzando con 1% y llegando hasta un 20% de contenido de hidrógeno como máximo, en un período de dos años, que es lo que aproximadamente durará el proyecto.
“Esta será la primera vez en Latinoamérica que se inyecta hidrógeno verde en las redes gas natural de una ciudad. Nuestros clientes de Coquimbo y La Serena estarán consumiendo gas natural con hidrógeno verde, lo cual significa que estarán reduciendo su huella de carbono”, señaló el gerente general de Gasvalpo, Luis Kipreos.
La empresa recalca que no existirán aumentos en las cuentas de los clientes y que este es un costo que será asumido completamente por la firma. Además, los artefactos a gas natural que utilizan en sus casas no se verán afectados.
La firma señala que las redes de distribución de gas natural siguen creciendo en la zona, así que los beneficiarios irán aumentando: “A partir de octubre, más de 1.800 familias en la Región de Coquimbo recibirán esta mezcla y se verán directamente beneficiados con el uso de hidrógeno verde, como también lo serán el resto de los habitantes de esta zona, que experimentarán una reducción en sus índices de contaminación”.
Balance y planes
Pese a la relevancia de la iniciativa, aseguran que están en las etapas iniciales de su adopción como combustible y todavía quedan materias por resolver. Por ejemplo, que hoy es mucho más caro que los combustibles tradicionales, que debe ser mezclado con gas natural para poder usar los mismos artefactos, que hay algunos materiales (no presentes en Coquimbo y La Serena) que requieren más pruebas empíricas antes de ser expuestos al hidrógeno por largos períodos, etc.
“Este proyecto ayudará en este proceso, y ya hay clientes industriales en otras zonas del país que están iniciando pruebas similares en sistemas de combustión más sofisticados”, relata Kipreos.
Consultado respecto de si contemplan nuevos proyectos, sincera: “Estamos comprometidos con el desarrollo del hidrógeno verde como combustible en el país y estamos evaluando nuevas iniciativas”.
Para el ejecutivo, el rol de las redes de distribución de gas natural será muy importante para la adopción del hidrógeno verde como combustible, y la cobertura de redes seguirá creciendo “en la medida que el Gobierno corrija el proyecto de ley que modifica la regulación de las empresas distribuidoras de gas natural, en lo relativo a rebajar la rentabilidad a los activos con más de 20 años”. Si se mantiene la rebaja que está siendo propuesta, advierte, “este crecimiento se va a ver severamente afectado”.
También apunta a que se debe corregir el impuesto a las emisiones de CO2.
Fuente: Diario Financiero, Jueves 8 de Septiembre de 2022