EL MERCURIO – La primera vez que el Metro de Santiago sobrepasó los 600 millones de pasajeros transportados al año fue en 2007, luego de que comenzara a operar el Transantiago. La puesta en marcha del nuevo sistema de transporte capitalino provocó que muchas personas cambiaran los buses por la red subterránea y se produjo un aumento de casi 270 millones de personas entre 2006 y 2007.
Ahora, el metro se alista para experimentar un nuevo crecimiento masivo de usuarios; pues, según las estimaciones, en 2026 serán 1.003 millones las personas que viajen en ese medio de transporte. Esta vez, la razón del incremento sería la expansión de la red.
El aumento
El presidente de la empresa estatal, Louis de Grange, expuso estos detalles al Consejo Regional Metropolitano y allí afirmó que hoy el metro “transporta al 38% de los pasajeros diarios del sistema, y cuando estén listos los proyectos anunciados, la red debería hacer casi el 60% de los viajes”.
Según su presentación, en 2017 el transporte subterráneo movilizó a 686 millones de personas, mientras que este año la cifra debería llegara 723 millones, principalmente debido al funcionamiento de la Línea 6, inaugurada en noviembre del año pasado.
En los próximos años se registrarán las alzas más importantes de afluencia con la entrada gradual de los proyectos: la operación de la nueva Línea 3, las extensiones de la 4 y 3, y las futuras líneas 7 (de Renca a Vitacura), 8 (Los Leones a Mall Plaza Tobalaba) y 9 (de Santa Lucía hasta La Pintana).
Así, en 2022, la red debería llegara 28 comunas, con 143 estaciones y 149 kilómetros de extensión, y alcanzaría una afluencia de 814 millones de pasajeros al año. En 2026, cuando se prevé que todos los proyectos estén en operación, se llegaría a 31 comunas con 162 estaciones y 175 kilómetros y se superarían los mil millones de usuarios. Según De Grange, solo las nuevas líneas 8 y 9 añadirán 30 mil y 35 mil pasajeros al año, respectivamente.
Para Julio Nazar, académico de la Facultad de Arquitectura y Arte de la Universidad del Desarrollo, el alza en los pasajeros muestra que el metro “es un transporte consolidado y que sigue posicionándose como la figura central del sistema de la capital”. Eso sí, dice que junto con las nuevas estaciones, la empresa debiera “generar nuevos subcentros en comunas carentes de ellos (…).Nuevo equipamiento y servicios que minimicen brechas sociales.
Extensiones
Hoy, los proyectos de la estatal se encuentran en distintas etapas de desarrollo. La Línea 3 está en fase final de obras; la 7, en estudios de ingeniería básica, y las 8 y 9 están en fase de ingeniería conceptual.
En la exposición, el presidente de Metro de Santiago dijo que espera definir la ubicación de las nuevas estaciones junto a los alcaldes y consejeros, para determinar los lugares más idóneos.
Igualmente, manifestó que ya están pensando en “futuras extensiones, que esperamos en breve plazo empezar a estudiar su factibilidad”. Por ejemplo, contó que en el caso de la Línea 9, “los estudios de ingeniería van a permitir que esta pueda a futuro conectarse con las líneas 7 y la 2, en Cal y Canto”.
Fuente: El Mercurio, Viernes 24 de agosto de 2018
