DIARIO FINANCIERO – “La meta que tenemos que considerar hoy como sociedad es buscar y desarrollar mejores herramientas tecnológicas, las que a su vez son cada día más accesibles, de manera que nos permitan utilizar en forma más eficiente los recursos hídricos”.
El agua es un bien indispensable para el sustento de la vida humana. No obstante, son muchas las causas que dificultan o imposibilitan el acceso a ella. La primera, y la más evidente, es que hoy enfrentamos en nuestro país una megasequía que se arrastra por más de 12 años. La segunda es el uso poco eficiente de los recursos hídricos disponibles actualmente. Hace más de dos décadas, a fines de los ’90, vivimos con la dura realidad del racionamiento hídrico en Chile, lo cual puede ser un fantasma que esté a la vuelta de la esquina, si no comenzamos a tomar medidas para enfrentar un cambio climático que, por ahora, llegó para quedarse y que es el factor determinante en la falta de precipitaciones.
Uno de los grandes desafíos que nos debe movilizar es garantizar el uso y la disponibilidad de agua para el consumo humano. De acuerdo con cifras de la Unesco, entre 2000 y 2019 más de 53 millones de personas se han visto afectadas por la sequía en el mundo.
De acuerdo al último Informe de Condiciones Hidrometeorológicas elaborado por la División de Hidrología de la Dirección General de Aguas (DGA) del Ministerio de Obras Públicas (MOP), actualmente, 104 comunas de Chile sufren de escasez hídrica, las cuales están ubicadas entre las regiones de Atacama y Los Lagos. Las comunidades rurales de nuestro país, especialmente en la zona central de Chile, son las que más sufren con este dramático escenario hídrico. Los cortes de suministro, la rotura de matrices y los vaciados de estanques son pan de cada día.
Se debe pensar en soluciones que hagan más eficiente el recurso hídrico, a través de la innovación y la tecnología.
Las tecnologías de la industria 4.0 pueden ofrecer una nueva revolución mediante una combinación de técnicas avanzadas de producción y operaciones con tecnologías inteligentes, como el Internet de las Cosas, Machine Learning, Inteligencia Artificial y la Analítica de Datos, las cuales se adaptan fácilmente a la medida de cada sistema, conectando múltiples dispositivos y controladores en plataformas unificadas de monitoreo remoto. Estas tecnologías eliminan problemas como la distancia entre distintos sectores, incorporan visibilidad a los sistemas y proporcionan información en tiempo real a los operadores, apoyando en la gestión hídrica operacional, lo que se traduce en un aumento real de la disponibilidad de agua para las comunidades, solo por efecto de una eficiente gestión del recurso.
Parte importante del desafío y la meta que tenemos que considerar hoy como sociedad es buscar y desarrollar mejores herramientas tecnológicas, las que a su vez son cada día más accesibles, de manera que nos permitan utilizar en forma más eficiente los recursos hídricos y otros recursos naturales de los que la sociedad dispone. Sabemos que estos son limitados, por eso, darles la gestión y el uso adecuado a través de la innovación es un camino clave en la búsqueda de cambiar positivamente la calidad de vida de quienes habitan en las zonas rurales de nuestro país.
Fuente: Diario Financiero, Miércoles 18 de Agosto de 2021