CPI – Ante los graves sucesos que han tenido lugar en el país en los últimos días, como Consejo nos ha parecido importante declarar lo siguiente:
Lamentamos que, encubierto en manifestaciones de disconformidad que legítimamente puedan expresarse, haya grupos que deliberadamente atenten contra bienes públicos altamente valorados por la comunidad, como son los servicios de transporte público y privado que tanto nos ha costado construir. No hay expresión más democrática que buenos servicios de esta naturaleza, en tanto son los que permiten terminar con la segregación, acercar a la gente, independientemente de su condición social, y facilitar el acceso a las prestaciones que toda ciudad le debe a sus habitantes. El deterioro causado al Metro de Santiago, de Valparaíso, la quema de buses y de instalaciones diversas para asegurar un buen sistema de transporte, afecta preferentemente a quienes más lo necesitan y valoran.
Compartimos la idea de que el país no puede paralizarse; muy por el contrario. Estas señales de disconformidad, que pueden verse amplificadas por los efectos del vandalismo, sólo refuerzan la necesidad de proyectarnos hacia un futuro mejor para nuestros ciudadanos. Este debe ser próspero, integrador y no excluyente desde el punto de vista de los beneficios que todos contribuimos a generar. En este sentido, desde nuestra especificidad nos ponemos a disposición de las autoridades para definir las condiciones que desde la infraestructura se deben dar para permitir el acceso más amplio posible a los servicios de calidad que esta debe proporcionar: hospitales, escuelas, áreas verdes, agua potable, electrificación, comunicaciones, transporte público y privado, redes de generación y distribución de agua para regadío, la minería, la industria, entre otros. La infraestructura es, por definición, inclusiva, en tanto permite que todos tengan acceso a bienes públicos sin exclusión, beneficiando la calidad de vida de las persona y la productividad de nuestras diferentes actividades económicas.
La urgencia de reparar los daños causados, de mejorar servicios aún poco efectivos y proyectar nuestros requerimientos de futuro sólo será posible de abordar en tanto se recupere el orden público que asegure la vigencia de una institucionalidad estable en el tiempo para lograr una adecuada interpretación de los requerimientos sociales, una identificación de los proyectos necesarios y una virtuosa relación de colaboración público privada para asumir los desafíos de inversión que corresponden. Este acuerdo debe alcanzarse lo antes posible y a él deben concurrir todos quienes tienen interés en el futuro del país.
Comité Ejecutivo
Consejo de Políticas de Infraestructura (CPI)
Martes 22 de Octubre de 2019
Declaración del Consejo de Políticas de Infraestructura
CPI – Ante los graves sucesos que han tenido lugar en el país en los últimos días, como Consejo nos ha parecido importante declarar lo siguiente:
Lamentamos que, encubierto en manifestaciones de disconformidad que legítimamente puedan expresarse, haya grupos que deliberadamente atenten contra bienes públicos altamente valorados por la comunidad, como son los servicios de transporte público y privado que tanto nos ha costado construir. No hay expresión más democrática que buenos servicios de esta naturaleza, en tanto son los que permiten terminar con la segregación, acercar a la gente, independientemente de su condición social, y facilitar el acceso a las prestaciones que toda ciudad le debe a sus habitantes. El deterioro causado al Metro de Santiago, de Valparaíso, la quema de buses y de instalaciones diversas para asegurar un buen sistema de transporte, afecta preferentemente a quienes más lo necesitan y valoran.
Compartimos la idea de que el país no puede paralizarse; muy por el contrario. Estas señales de disconformidad, que pueden verse amplificadas por los efectos del vandalismo, sólo refuerzan la necesidad de proyectarnos hacia un futuro mejor para nuestros ciudadanos. Este debe ser próspero, integrador y no excluyente desde el punto de vista de los beneficios que todos contribuimos a generar. En este sentido, desde nuestra especificidad nos ponemos a disposición de las autoridades para definir las condiciones que desde la infraestructura se deben dar para permitir el acceso más amplio posible a los servicios de calidad que esta debe proporcionar: hospitales, escuelas, áreas verdes, agua potable, electrificación, comunicaciones, transporte público y privado, redes de generación y distribución de agua para regadío, la minería, la industria, entre otros. La infraestructura es, por definición, inclusiva, en tanto permite que todos tengan acceso a bienes públicos sin exclusión, beneficiando la calidad de vida de las persona y la productividad de nuestras diferentes actividades económicas.
La urgencia de reparar los daños causados, de mejorar servicios aún poco efectivos y proyectar nuestros requerimientos de futuro sólo será posible de abordar en tanto se recupere el orden público que asegure la vigencia de una institucionalidad estable en el tiempo para lograr una adecuada interpretación de los requerimientos sociales, una identificación de los proyectos necesarios y una virtuosa relación de colaboración público privada para asumir los desafíos de inversión que corresponden. Este acuerdo debe alcanzarse lo antes posible y a él deben concurrir todos quienes tienen interés en el futuro del país.
Comité Ejecutivo
Consejo de Políticas de Infraestructura (CPI)
Martes 22 de Octubre de 2019