EL MERCURIO – Hasta antes de la entrada en vigencia de la Ley de aportes al espacio público, cosa que sucederá en al menos 18 meses más, contábamos con muy débiles mecanismos que permitieron que el desarrollo urbano fuera de la mano con una mejora sistemática de los estándares urbanos. Así, los barrios más atractivos de nuestras ciudades, ya sea por localización o por atributos de equipamiento, espacios públicos y otros, se densifican porque la industria inmobiliaria, respondiendo a los intereses de los futuros habitantes, busca aprovechar esas virtudes. Sin embargo, esos mismos procesos de densificación contribuyen directamente a disminuir esos atributos al incluir mayor cantidad de habitantes para igual disponibilidad de equipamientos y atributos que no aumentan.
Fuente: El Mercurio, Martes 30 de enero de 2018