LA TERCERA – La necesidad de retomar la actividades productivas, sociales y culturales manteniendo el debido distanciamiento físico cambiará de manera temporal, y tal vez a largo plazo el espacio público de nuestros principales centros urbanos.
El transporte público es crítico para viabilizar el retorno, y todavía es visto como factor de riesgo por la concentración de pasajeros en buses y Metro. Pero las señales son promisorias. La revista Science publicó que en Japón, conocido por sus metros y trenes atestados de pasajeros, durante el desconfinamiento no se han detectado focos de contagio, y los pasajeros obedientemente usan máscaras, evitan hablar y cuidan su distancia. En la medida que se aumente la oferta de recorridos, frecuencias, y se prioricen los corredores de buses en superficie, estos pueden bajar sus niveles de hacinamiento y prestar servicios más seguros. Para lograrlo será necesario reducir el espacio para vehículos particulares, cuyos viajes se prevé aumentarán mientras continúe el temor al transporte.
En la ciudad post Covid, los viajes más seguros serán aquellos que se realizan a pie o en ciclos -bicicletas, scooters y otros-, ya que se efectúan al aire libre y con debido distanciamiento. Para que ello ocurra es clave contar con el suficiente espacio. Aprovechando la baja en congestión de los últimos meses, ciudades de todo el mundo han avanzado en ampliar el espacio para peatones, ciclos y buses por sobre el de los otros vehículos, especialmente en lugares de alta confluencia de gente como ferias, comercio o servicios públicos. Caso ejemplar es el trabajo realizado por la municipalidad de Rancagua junto a la ONG Espacio Lúdico, donde se han tomado y demarcado parte de la calzada para generar zonas de espera y filas con distanciamiento frente a sus principales dependencias.
A partir de esta experiencia, Espacio Lúdico, con el apoyo de la facultad de arquitectura de la UDD, los ministerios de Vivienda, Transportes, Desarrollo Social, y las dos asociaciones de municipalidades Amuch y AChM lanzarán este miércoles la iniciativa Ciudad Colaborativa, donde se invita a todos los municipios a postular para que en 10 de ellos se desarrollen “Planes de Intervenciones Tácticas” de ágil implementación, bajos recursos e inmediato resultado. Las intervenciones incluyen, entre otras, la peatonalización de calles, ensanchamiento de veredas, ciclovías temporales, calles compartidas, zonas de higiene y reordenamiento de ferias libres. Estas intervenciones serán co-diseñadas junto a equipos municipales, estudiantes y la comunidad, y cinco de ellas serán construidas como parte de la iniciativa. A esto se suma la Guía de Demarcación de Veredas publicada por el Minvu y un plan nacional para promover un retorno seguro al transporte público que anunciará el MTT.
Si bien no hay certeza de cuánto cambiarán nuestros estilos de vida en la ciudad, se advierten espacios de oportunidad para que el retorno sea co-diseñado y promoviendo el bienestar de las ciudades con una visión centrada en las personas.
Fuente: La Tercera, Domingo 12 de Julio de 2020