AMÉRICA RETAIL – Brasil impulsa modernización de su infraestructura portuaria e hidroviaria a través de Licitaciones Públicas.
Brasil, como una de las economías más grandes de América Latina, está dando pasos decisivos para modernizar su infraestructura logística a través de la implementación de nuevos contratos de concesión para puertos y vías navegables. Este esfuerzo tiene como objetivo diversificar la matriz de transporte del país, históricamente dependiente de las carreteras, y mejorar la eficiencia del comercio nacional e internacional. A medida que el gobierno se prepara para lanzar una serie de subastas de concesiones y asociaciones público-privadas (APP), se presentan tanto oportunidades significativas como desafíos para el desarrollo de estas infraestructuras clave.
Contexto y Necesidad de Diversificación Logística
Brasil, con su vasta extensión territorial y su compleja geografía, enfrenta el reto de mantener y desarrollar una infraestructura de transporte eficiente que pueda sostener su economía en crecimiento. Tradicionalmente, el transporte por carretera ha sido la columna vertebral de la logística brasileña, representando un alto porcentaje del movimiento de mercancías. Sin embargo, esta dependencia ha generado cuellos de botella, altos costos operativos y una vulnerabilidad a factores como el deterioro de la infraestructura vial y los fenómenos climáticos extremos.
Para mitigar estos riesgos y mejorar la competitividad del país, el gobierno brasileño ha identificado la necesidad de diversificar su matriz logística, priorizando el desarrollo de vías navegables y puertos. Este enfoque no solo busca reducir los costos de transporte, sino también contribuir a la sostenibilidad ambiental, al promover modos de transporte que generen menos emisiones de carbono.
Subastas de Contratos para Hidrovías
El primer paso significativo en este plan es la organización de subastas para concesionar la operación de importantes vías navegables. Según Eduardo Nery, director de la Agencia Nacional de Transportes Acuáticos (Antaq), las primeras subastas se realizarán en 2025, con un enfoque inicial en dos proyectos clave: la hidrovía del río Madeira y la hidrovía del río Paraguay.
Estas hidrovías, que cubren regiones estratégicas de Brasil, tienen un volumen consolidado de carga que las hace viables sin necesidad de subsidios gubernamentales. Esto sugiere que se optará por un modelo de concesión tradicional en lugar de una APP, donde el sector privado asume la totalidad de la inversión y el riesgo, a cambio de la explotación de los recursos por un periodo determinado.
La hidrovía del río Madeira, que conecta Porto Velho en Rondônia con Itacoatiara en Amazonas, y la del río Paraguay, que atraviesa Mato Grosso y Mato Grosso do Sul, son rutas críticas para el transporte de productos agrícolas y minerales, esenciales para la economía brasileña. Estos proyectos no solo facilitarán el transporte de mercancías a menor costo, sino que también contribuirán a la integración regional y al desarrollo de las áreas más remotas del país.
Evaluación Caso por Caso: La Clave del Éxito
Nery subraya que la elección del modelo de concesión o APP debe hacerse caso por caso, considerando las particularidades de cada proyecto. Mientras que las hidrovías del río Madeira y Paraguay parecen ser viables sin la necesidad de apoyo gubernamental, otros proyectos podrían requerir un enfoque diferente.
Un ejemplo claro de esta flexibilidad es el proyecto de la hidrovía Lagoa Mirim, también conocida como hidrovía Brasil-Uruguay. Aquí, el Departamento Nacional de Infraestructura de Transportes (DNIT) está invirtiendo en la construcción del canal de navegación antes de ofrecer el contrato al sector privado. Este tipo de intervención reduce el riesgo para el futuro operador, haciéndolo más atractivo para los inversionistas.
Además de estos proyectos, el gobierno está evaluando otros cuatro contratos de vías navegables, incluidos los de la hidrovía Barra Norte, la hidrovía del río Tocantins, y la hidrovía del río Tapajós. Estos proyectos están siendo modelados por el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) y la empresa Infra SA, y se espera que entren en proceso de consulta pública y audiencias en 2025.
Planificación de Subastas para Terminales Portuarias
Paralelamente al desarrollo de las hidrovías, Brasil también está avanzando en la concesión de terminales portuarias. El país planea ofrecer seis contratos de arrendamiento de terminales portuarias antes de finales de 2024, con subastas programadas entre octubre y diciembre. Estos contratos incluyen importantes terminales como PAR14 y PAR15 en el puerto de Paranaguá, en el estado de Paraná, y la terminal ITG02 en el puerto de Itaguaí, en Río de Janeiro.
Estas terminales están diseñadas para manejar grandes volúmenes de carga, y se espera que atraigan inversiones significativas del sector privado. En total, se proyecta que las inversiones en estas tres terminales alcancen los 4.500 millones de reales (aproximadamente 810 millones de dólares), con 1.500 millones de reales destinados a Paranaguá y 3.000 millones a Itaguaí.
Además de estas grandes terminales, el gobierno también subastará terminales más pequeñas, como VDC29 en Vila de Conde, en el estado de Pará, y varias en el puerto de Santana, en el estado de Amapá. Estas subastas son parte de un esfuerzo más amplio para modernizar y expandir la capacidad portuaria de Brasil, lo que es crucial para sostener el crecimiento de sus exportaciones, especialmente en sectores como el agrícola y el minero.
Desafíos en la Implementación y Consideraciones Ambientales
Uno de los mayores desafíos que enfrenta Brasil en la implementación de estos proyectos es la creciente preocupación por los riesgos asociados a los fenómenos climáticos extremos. El cambio climático está afectando cada vez más la frecuencia e intensidad de eventos como inundaciones, sequías y tormentas, lo que puede tener un impacto significativo en la operación de puertos y vías navegables.
Para abordar estos desafíos, Antaq está incorporando mecanismos de distribución de riesgos en los contratos de concesión. Estos mecanismos están diseñados para garantizar que los concesionarios tengan acceso a solicitudes de reequilibrio contractual en caso de que se materialicen los peores escenarios de riesgo climático. Además, siguiendo el ejemplo del Ministerio de Transporte, que ha reservado un 1% de los contratos de concesión de carreteras para proyectos de mitigación del riesgo climático, Antaq también está considerando medidas similares en el sector de vías navegables.
Fortalecimiento Institucional y el Futuro del Transporte Fluvial en Brasil
Para asegurar el éxito de estas iniciativas, es fundamental que Antaq y otras agencias reguladoras cuenten con la estructura y el personal adecuados. Actualmente, Antaq opera con un déficit de personal del 25%, lo que limita su capacidad para supervisar y regular eficazmente los proyectos en curso. Sin embargo, se espera que en los próximos meses se sumen 30 nuevos servidores públicos a la agencia, con planes de continuar incrementando su plantilla en los próximos años.
A pesar de estas limitaciones, Antaq ha demostrado ser eficiente en la gestión de su presupuesto, que asciende a 53 millones de reales anuales, una suma relativamente baja en comparación con las inversiones que genera el trabajo del regulador. Esta eficiencia es crucial, ya que el éxito de las subastas planificadas depende en gran medida de la capacidad de Antaq para garantizar un entorno regulatorio estable y predecible para los inversionistas.
El plan de Brasil para licitar concesiones en puertos y vías navegables marca un paso importante hacia la modernización de su infraestructura logística. Al diversificar su matriz de transporte y promover modos más sostenibles de movimiento de mercancías, el país no solo mejora su competitividad económica, sino que también contribuye a la mitigación del cambio climático. Sin embargo, el éxito de estas iniciativas dependerá de la capacidad del gobierno para gestionar los riesgos asociados, garantizar un entorno regulatorio favorable y atraer la participación del sector privado en un contexto de crecientes desafíos ambientales y económicos.
Fuente: América Retail, Martes 27 de Agosto de 2024
