DIARIO FINANCIERO – El Hidrógeno Verde (HV) está tomando cada vez mayor importancia para el desarrollo económico sostenible en Chile y el mundo en el escenario de cambio climático. Desde hace un año y medio, el Banco Mundial (BM) está asesorando a las autoridades y aportando recursos para levantar esta industria desde cero, dado el potencial que tiene el país para su desarrollo.
El director de Infraestructura para América Latina y el Caribe del Banco Mundial, Franz Drees-Gross, viajó a Chile la semana pasada para reunirse con actores clave de los sectores público y privado, con el fin de detectar obstáculos y apalancar financiamiento para un fondo de inversión que fomente el desarrollo de la industria de HV en el país.
“Diseñamos este fondo de acuerdo a lo que nos dijo el mercado sobre sus obstáculos. Pensamos que Chile puede tener condiciones para ser los primeros en tener una facilidad crediticia de este tipo, ya que reúne los requisitos y está el interés del nuevo Gobierno en hacerlo”, comenta Drees-Gross.
La idea del fondo público-privado, surgió en conjunto con los ministerios de Energía y Hacienda y tras realizar un sondeo de mercado en 2021 con más de 20 empresas para analizar cuáles son los aspectos que dificultan la inversión en HV.
Es el primer proyecto de este tipo que implementa el BM en estas materias en el país y está planificado para lanzarse el segundo semestre de este año.
Una vez que el fondo esté operativo, se entregarán recursos a las empresas que buscan realizar proyectos en este campo. Esto se traducirá en préstamos, subsidios y financiamiento para la tecnología, es decir, para los electrolizadores, el equipo que crea hidrógeno verde a través de un proceso de electrólisis con energía renovable.
Ventaja comparativa
Drees-Gross explica que los principales competidores de Chile en materias de HV serían Marruecos, Arabia Saudí, Australia, Estados Unidos, Brasil y países de África del Sur.
No obstante, el ejecutivo del BM afirma que Chile es “uno de los mejores lugares del mundo” para el desarrollo del hidrógeno verde por dos factores: su ubicación geográfica y una institucionalidad robusta.
“El desarrollo de energías renovables para Chile es una ventaja comparativa tremenda en términos geográficos, lo que se ve en las condiciones para producir energía solar y eólica a lo largo del país”, dice Drees-Gross.
Añade que “para que este sector crezca, se requiere un marco regulatorio que le dé seguridad al sector privado para que invierta, y Chile es reconocido por tener un marco de inversiones atractivo”.
En 2020, el exministro de Energía, Juan Carlos Jobet, presentó una estrategia nacional de hidrógeno verde a 2050 con cuatro ejes: desarrollar regulación para su uso y producción; analizar planes y políticas del combustible a nivel internacional; definir una estrategia interministerial -en conjunto con el sector privado y la academia-, e identificar proyectos de privados para analizar opciones de cofinanciamiento. En esa oportunidad, la autoridad destacó que el kilo de HV podría costar US$ 1,5 a 2030, lo que sería un “precio competitivo”.
Drees-Gross ve posibles estos planes, pero señala que primero se deben considerar aspectos como el desarrollo de los electrolizadores. “El electrolizador como tecnología no es nuevo, pero lo que sí es nuevo son los de gran capacidad que trabajan a lo largo de muchos años y que deben ser probados, como es el caso de los que funcionan con energía solar”, afirma.
A inicios de este mes, se publicó el último informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), donde una de las soluciones para disminuir el 43% de las emisiones a 2030, es acelerar el desarrollo del HV.
Frente al rol que podría cumplir Chile de cara al cambio climático, el ejecutivo del BM señala que el país podría ser clave en implementar HV para reducir las emisiones en el sector minero, particularmente en los camiones utilizados para la extracción y el consumo de energía a base de combustibles fósiles.
Sistema de certificación
Con respecto a proyectos que Chile podría replicar desde el exterior, Drees-Gross dice que “al ser una industria relativamente nueva, no hay tantas experiencias que Chile no haya tenido hasta ahora. Creo que Chile es casi el punto de la lanza”.
Sin embargo, dice que es importante que el país comience a gestionar los procesos de certificación internacionales, y que el Banco ya ha comenzado a trabajar.
“Si Chile quiere exportar, necesita un sistema de certificación de hidrógeno verde, tal como el CertifHy, que es el sistema europeo. Esto sería para que nadie dude de la calidad del hidrógeno verde chileno, en relación a su origen y estándares de seguridad”, destaca Drees-Gross.
Afirma que el BM continuará trabajando en la industria de HV chilena debido al potencial que tiene. “Se estima que hasta 2030 el HV podría crear más de 20.000 empleos en Chile, y para ese año también el pronóstico es que el costo de producción de hidrógeno verde podría bajar a niveles que serán equivalentes al hidrógeno gris”, sostiene el ejecutivo.
Fuente: Diario Financiero, Martes 12 de Abril de 2022