EL MERCURIO – Ha concluido la consulta ciudadana para definir cómo se realizarán las licitaciones de espectro para comunicaciones inalámbricas 5G. Las conclusiones no han sido publicadas aún, pero se entiende que el Gobierno pretende realizar cuatro licitaciones, dos de ellas por pequeñas cantidades de espectro en la zona de 700 MHz y en la de 1.700-2.150 MHz, que permitirían emparejar la cancha entre los actores de telefonía móvil. Las licitaciones más importantes serían las de las bandas de 3,5 GHz y especialmente en la banda milimétrica de 28 GHz. Allí se licitarían 800 MHz de espectro, y es lo que promete mayores beneficios a los usuarios.
En realidad, hay mucha desinformación sobre las virtudes del 5G. En las frecuencias bajas la tecnología será solo un poco más rápida que el 4G actual, porque la cantidad de información que se puede entregar por Hertz ya está cerca de su máximo. Es por eso que la licitación en la zona de 28 GHz resulta tan importante: al ofrecerse tanto espectro, cada estación de telefonía móvil dispondrá de una cantidad mucho mayor de capacidad de comunicaciones para repartir entre los usuarios. Otra ventaja del sistema es que la respuesta —latencia— debería ser más rápida, lo que permitiría comunicaciones con alto grado de seguridad, que pueden usarse en el sector financiero. Y también, como en los videos promocionales del 5G, para realizar cirugías a distancia.
Un problema es que en la zona alta del espectro cualquier obstáculo interrumpe la señal, a diferencia de la banda de 700 MHz, que por lo mismo es más apetecida por los operadores. Por lo tanto, el servicio 5G necesita muchas más celdas para poder operar eficientemente. El otro problema de la zona de 28 GHz es que ella es utilizada por las comunicaciones satelitales. Dado que hay varios proyectos para proveer servicios de internet de calidad, mediante satélites, a áreas aisladas, es necesario compatibilizar ambos usos.
La Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel) está interesada en que Chile sea uno de los pioneros en América Latina en 5G, por lo que desearía licitar en el futuro cercano. Las empresas de telefonía móvil saben que su propio futuro depende de obtener parte de este espectro, pero tienen menos recursos para desarrollar la tecnología que en el pasado, porque la mayor intensidad de competencia ha reducido sus utilidades. Por lo tanto, les beneficiaría un despliegue más lento. En este contexto, la Subtel ha propuesto que en las licitaciones no se exija inicialmente una cobertura nacional. La idea es dar puntaje adicional a postulantes que se comprometan a concentrar sus primeros esfuerzos de despliegue no solo en zonas de alta densidad de usuarios residenciales o de oficinas, sino también en áreas productivas fuera de regiones urbanas, como puertos, zonas mineras y agrícolas: los denominados “polígonos industriales”. Esto contribuiría a la descentralización del país.
Con todo, es probable que los mayores beneficios del 5G no se perciban sino hasta bastante tiempo después. Para los usuarios la capacidad máxima de descarga será solo algo mayor que bajo 4G, aunque funcionará más a menudo a esa capacidad máxima. Por su parte, los efectos sobre los sectores productivos serán mucho más lentos, pues requieren cambiar procesos e invertir en nuevos equipos.
Fuente: El Mercurio, Lunes 24 de Febrero de 2020
Avances en 5G
EL MERCURIO – Ha concluido la consulta ciudadana para definir cómo se realizarán las licitaciones de espectro para comunicaciones inalámbricas 5G. Las conclusiones no han sido publicadas aún, pero se entiende que el Gobierno pretende realizar cuatro licitaciones, dos de ellas por pequeñas cantidades de espectro en la zona de 700 MHz y en la de 1.700-2.150 MHz, que permitirían emparejar la cancha entre los actores de telefonía móvil. Las licitaciones más importantes serían las de las bandas de 3,5 GHz y especialmente en la banda milimétrica de 28 GHz. Allí se licitarían 800 MHz de espectro, y es lo que promete mayores beneficios a los usuarios.
En realidad, hay mucha desinformación sobre las virtudes del 5G. En las frecuencias bajas la tecnología será solo un poco más rápida que el 4G actual, porque la cantidad de información que se puede entregar por Hertz ya está cerca de su máximo. Es por eso que la licitación en la zona de 28 GHz resulta tan importante: al ofrecerse tanto espectro, cada estación de telefonía móvil dispondrá de una cantidad mucho mayor de capacidad de comunicaciones para repartir entre los usuarios. Otra ventaja del sistema es que la respuesta —latencia— debería ser más rápida, lo que permitiría comunicaciones con alto grado de seguridad, que pueden usarse en el sector financiero. Y también, como en los videos promocionales del 5G, para realizar cirugías a distancia.
Un problema es que en la zona alta del espectro cualquier obstáculo interrumpe la señal, a diferencia de la banda de 700 MHz, que por lo mismo es más apetecida por los operadores. Por lo tanto, el servicio 5G necesita muchas más celdas para poder operar eficientemente. El otro problema de la zona de 28 GHz es que ella es utilizada por las comunicaciones satelitales. Dado que hay varios proyectos para proveer servicios de internet de calidad, mediante satélites, a áreas aisladas, es necesario compatibilizar ambos usos.
La Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel) está interesada en que Chile sea uno de los pioneros en América Latina en 5G, por lo que desearía licitar en el futuro cercano. Las empresas de telefonía móvil saben que su propio futuro depende de obtener parte de este espectro, pero tienen menos recursos para desarrollar la tecnología que en el pasado, porque la mayor intensidad de competencia ha reducido sus utilidades. Por lo tanto, les beneficiaría un despliegue más lento. En este contexto, la Subtel ha propuesto que en las licitaciones no se exija inicialmente una cobertura nacional. La idea es dar puntaje adicional a postulantes que se comprometan a concentrar sus primeros esfuerzos de despliegue no solo en zonas de alta densidad de usuarios residenciales o de oficinas, sino también en áreas productivas fuera de regiones urbanas, como puertos, zonas mineras y agrícolas: los denominados “polígonos industriales”. Esto contribuiría a la descentralización del país.
Con todo, es probable que los mayores beneficios del 5G no se perciban sino hasta bastante tiempo después. Para los usuarios la capacidad máxima de descarga será solo algo mayor que bajo 4G, aunque funcionará más a menudo a esa capacidad máxima. Por su parte, los efectos sobre los sectores productivos serán mucho más lentos, pues requieren cambiar procesos e invertir en nuevos equipos.
Fuente: El Mercurio, Lunes 24 de Febrero de 2020