LA TERCERA – En el reporte de este miércoles sobre las estaciones de telecomunicaciones caídas en las regiones de Ñuble, Biobío y La Araucanía producto de los incendios, la Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel) entregó un nuevo balance donde señala que hay 132 torres inoperativas en la zona, donde la región más afectada sigue siendo Biobío con 92 caídas y el 4% de afectación. Le sigue La Araucanía, con 23 estaciones menos y con 1% de territorio comprometido, mientras que Ñuble reporta 17 torres caídas y con un 2% de la región comprometida.
Si bien las cifras varían con el transcurrir de las horas y la cobertura es muy dinámica, el subsecretario de Telecomunicaciones, Claudio Araya, sostiene que “tenemos algunas contingencias más graves que otras porque tenemos algunos cerros que son puntos críticos de la red, vale decir, hay una antena, pero además hay enlaces que atienden a otras antenas”.
No obstante, aclara que hasta este minuto dos son las estaciones que presentan destrucción por el fuego: “Una en Nacimiento y otra en Santa Juana”, mientras que hay otro caso “que aún no está confirmado en Coelemu”.
La prioridad para Araya es reparar apenas el fuego lo permita, porque la caída de las estaciones impide el funcionamiento del Sistema de Alerta de Emergencias (SAE). Añade que las cuadrillas ya han refaccionado más de 20 torres durante la emergencia. También sostiene que como paliativo se ha activado un roaming nacional y un plan solidario para las zonas afectadas por los incendios.
“Usamos antenas para cubrir otras zonas sin señal o reorientamos la antena. Lo otro es que estamos analizando la opción de instalar un carro móvil en un sector”, dice el subsecretario, aunque respecto a las antenas móviles advierte que “estamos analizando que efectivamente ayuden porque un carro móvil significa una bomba de combustible (…) podría ser un estorbo más que una ayuda”.
Respecto a las estaciones caídas, ¿cuáles son las repercusiones en la población? ¿Cuántos afectados hay?
La cantidad de estaciones afectadas es una cifra supervariable, el número de hoy está en alrededor de 130. Hemos coordinado con las empresas privadas para que cuando cae una antena producto del fuego entren y reparen con la autorización de Conaf. Todos los días se están reparando y todos los días están fallando otras, entonces es superdinámico. Tenemos algunas contingencias más graves que otras porque tenemos algunos cerros que son puntos críticos de la red, vale decir, hay una antena, pero además hay enlaces que atienden a otras antenas. El sábado tuvimos una caída en el cerro Cayumanque, ese atendía como al 30% de la región del Ñuble. En cuanto se despejó, fueron a reparar y en unas pocas horas quedó reparado. Hoy estamos en una situación de riesgo porque en el Cayumanque se había cortado la electricidad, pero no estaban con fuego, hoy día hay fuego en el cerro, tenemos a equipos especializados de la Conaf actuando como cortafuegos para impedir que llegue a la base. Podríamos dejar al 30% de Ñuble afuera, de un paraguazo. Igual los niveles de afectación siempre son estimaciones bastante burdas al final del día.
Teníamos el centro de mando de incendios de Cauquenes, en un sector que había muy mala señal porque se había perdido una antena, y una de las empresas le dio más potencia a otra antena y logró cubrir la zona. Entonces con la antena que estaba formalmente caída no hubo problema porque la otra pudo atender ese tráfico, eso lo logramos gracias al Roaming Automático Nacional (RAN), que permite que los teléfonos funcionen con una antena de cualquier compañía, esas son las contingencias. Me gustaría darte un número (de afectados), pero lo que te diga va a ser mentiroso por la dinámica de la caída de sitios. La única forma de saberlo es ir para allá, y si mandamos a alguien es a arreglar más que a contar cuántos no tienen señal.
¿Cuál es el catastro de las estaciones que tienen más daños y las que se están reparando?
Tenemos pocas que se han quemado. Hay una en Nacimiento y otra en Santa Juana y había una en un sitio que aún no está confirmado en Coelemu, estaba fuera de servicio, pero estaba dentro de la zona siniestrada y no se podía llegar a mirar si es que efectivamente el sitio se había quemado o no. Han sido pocos sitios siniestrados porque en general manejan hartas áreas de protección en torno a la torre. Está desmalezado entonces el fuego no llega a la torre misma, sin embargo, el fuego igual puede generar daños, pero han sido pocos. La mayor afectación no han sido quemas de sitios (torres), sino que quema de fibras ópticas o de transmisión eléctrica que dejan sin energía o sin comunicación al sitio.
¿Cuál es la región más afectada?
En números gruesos, en Biobío tenemos un 4% de afectación, hay 92 que están fuera de servicio. De 2.541 antenas, hay 92 que están fuera de servicio.
¿En qué lugares son las mayores reparaciones que se han hecho?
En todas partes, en Maule, Ñuble, Biobío y La Araucanía hay cuadrillas que han estado trabajando todos los días desde que empezó la contingencia. Repararon 20 sitios por lo menos. Por cantidad de sitios siniestrados lo que más se reparó ayer fue en La Araucanía, pero eso cambia de un día a otro, depende del incremento del fuego.
Para aclarar, ¿a qué nos referimos con estaciones? ¿Cuánto territorio abarcan?
Una torre muchas veces puede albergar varias antenas, una para 2G, otra para 3G, una de 4G, una de tal empresa y otra de otra. Entonces en una torre vas a contar con hartas antenas, lo que informamos normalmente son las torres siniestradas y de esas nos ha pasado que se cae el 3G y 4G, pero sigue el 2G.
¿Y cuántas antenas hay por estación?
En zonas rurales, una o máximo dos. En sectores urbanos se trata de que cubran unas pocas cuadras. En zonas rurales se trabaja con la lógica inversa: pocas estaciones para grandes extensiones. Entonces estamos hablando de un alcance de 12 a 15 kilómetros a la redonda.
¿El Sistema de Alerta de Emergencia (SAE) se ve implicado en la caída de estas estaciones?
Sí. Por eso nos preocupa tanto lo de las personas aisladas. Si no te llega ninguna señal móvil, no te va a llegar el SAE.
¿Han estudiado nuevas alternativas?
Sí, pero no son para ahora, no se implementan en semanas. Tenemos dos proyectos con distintos operadores de servicios satelitales que van a permitir mandar mensajes de emergencia desde el satélite y eso va a ser independiente de lo que suceda en tierra, por lo tanto en casos de tsunamis o erupciones de volcanes, vas a tener una señal desde el aire que dice que vas a tener que evacuar, para eso yo creo que nos falta un año todavía porque es una tecnología emergente. La anunció recién hace un par de meses Starlink con un estudio y el operador también. Mientras tanto hacemos medidas paliativas, usamos antenas para cubrir otras zonas sin señal o reorientamos la antena. Lo otro es que estamos analizando la opción de instalar un carro móvil en un sector. Ahora, en Chile hay pocos y todos ocupados, son un poco más de diez en el país y están todos instalados en distintos lugares. Hay uno que se usó para la Copa Davis que podría servir para una zona de estas. Estamos analizando que efectivamente ayuden porque un carro móvil significa una bomba de combustible. Tiene que ser en una zona absolutamente segura y, desde allí, como son móviles podría ser un estorbo más que una ayuda.
Usted hablaba de potenciar y reorientar antenas, ¿cómo es el proceso para lograrlo?
Tiene que ir una cuadrilla hasta la torre, una cuadrilla típicamente son entre dos y cinco personas según la empresa. Si tienen un sistema de comando remoto, desde la misma caseta controlan la inclinación de la antena. Puede estar más o menos vertical, en jerga le llamamos tilt. Y ese tilt cuando está en 0°, está absolutamente vertical y dispara en forma perpendicular a la antena, digamos que hacia todos lados. Y cuando la quieras focalizar la inclinas un poco.
Para darle más potencia es delicado porque hay normas de emisiones eléctricas, no podemos generar infinita potencia en el aire porque podríamos causar daños, entonces dentro de esos márgenes se le da más potencia para que tenga mayor alcance, una que está alcanzando 12 kilómetros puede alcanzar 16 dándole más potencia, es como darle más volumen a la radio.
Y si se corta la luz, ¿qué pasa con la antena?
Tenemos distintos niveles de respaldo de energía. Hay torres que lo tienen para una hora, otras para seis o hasta 48 horas. Tienen baterías y los sitios más críticos tienen respaldo de mayor duración.
Fuente: La Tercera, Miércoles 8 de Febrero de 2023