BIOBÍO CHILE – El proyecto de tranvía con el que se pretende unir La Serena y Coquimbo a través de un trazado de 13,6 kilómetros entre el Hospital de la comuna-puerto y la avenida Francisco de Aguirre en la capital regional, cumple un nuevo año sin mostrar mayores avances, por lo que hasta el 2023, por lo menos, habrá que esperar su factibilidad.
Cabe recordar que este proyecto, a cargo de la empresa CKC Infraestructura Sustentable, fue declarado de Interés Público por parte de la Dirección General de Concesiones. Para concretarlo se han llevado a cabo una serie de estudios de demanda, ingeniería o ambientales, los cuales han costado casi 5 mil millones de pesos.
A mediados de 2018, la empresa a cargo informó que había finalizado su trabajo y que la información disponible permitía realizar un llamado a licitación internacional para su construcción, pero ello no ha ocurrido hasta hoy.
Fases del proyecto
Consultado por el proyecto de tranvía, el seremi de Obras Públicas de la región de Coquimbo, Pedro Rojas, explicó que actualmente el proyecto “se encuentra en una etapa de proposición, es decir, está en los estudios de la Fase 1 ya finalizados y en revisión final de la Fase 2”.
Rojas señaló que en dicho proceso se han generado nuevas observaciones, las cuales deben ser enviadas al proponente del proyecto –es decir, a la empresa– con lo que se pretende avanzar con el cierre de los estudios relacionados a la iniciativa en sí.
En ese sentido, cabe recordar que uno de los puntos que se cuestionó en su momento al proyecto original fue que éste no atendía a los sectores más populosos de la conurbación, como por ejemplo Las Compañías, lo que generó cuestionamientos sobre la iniciativa.
“Así efectivamente, una vez obtenidos los resultados de los análisis técnicos y la subsanación de las observaciones como tal, (el proyecto) podría avanzar al proceso de licitación que cabe destacar que está en la cartera de concesiones precisamente para el cuarto trimestre del año 2023”, señala la autoridad.
Proyecto relevante
Lo cierto es que la materialización del proyecto de tranvía es visto como una iniciativa necesaria para el área urbana de Coquimbo y La Serena. En los últimos años, el sector, ha visto crecer de manera acelerada su población y con ello también el atochamiento vehicular.
Pero además, el efecto de su construcción sería multiplicador en otras áreas.
Para Marcelo Olivares, director del Instituto de Políticas Públicas de la Universidad Católica del Norte, llevar a cabo este tipo de iniciativas tendría en lo inmediato “efectos positivos sobre el empleo“. Aseguró además que, “las ganancias que se pudieran generar en los tiempos de viaje, permitiría a la población poder programar de mejor manera sus tiempos y desplazamientos”.
Adicionalmente, permitiría a la población poder integrar otras formas de desplazamiento, dijo el académico, “como es el caso de las bicicletas hasta las estaciones, además de poder recuperar algunos espacios para los y las peatones”.
Para Olivares, en el escenario actual de alta congestión vehicular, proyectos modernos como este “se transforman en una medida eficaz para el transporte de las personas.
Finalmente, resaltó los importantes co-beneficios como la disminución de emisiones y mejora en la calidad del aire en las ciudades, además de contribuir a la reactivación económica y el desarrollo económica local”.
Fuente: BioBío Chile, Jueves 21 de Octubre de 2021