DIARIO FINANCIERO – La Mesa Nacional del Agua fue convocada a principios de octubre del año pasado por el Presidente Piñera para generar estrategias de cara a la severa crisis por escasez de agua que afecta al país. En esa fecha, previa al estallido del conflicto social, la emergencia hídrica —la más grave en varias décadas— era una prioridad nacional que llenaba titulares y noticieros.
Un mes antes, la crisis había sido puesta en perspectiva en un preocupante Informe Nacional de Disponibilidad Hídrica del propio gobierno, y un amplio espectro de actores políticos y de la sociedad civil pedía medidas para enfrentarla en lo inmediato, a la vez que políticas de largo plazo para estar mejor preparados de cara al futuro. Lamentablemente, los sucesos de octubre desplazaron de la discusión pública la dramática realidad de la falta de agua en muchas zonas del país, que sin embargo continúa hasta hoy.
Esta instancia de carácter público-privado, luego de un proceso de intercambio y consulta con una gran diversidad de actores, identificó 12 ejes temáticos que ordenó en torno a tres grandes desafíos: seguridad hídrica; calidad de las aguas y ecosistemas relacionados; y marco legal. Realizado ese ejercicio, la mesa propone un cronograma durante 2020 para comenzar a abordar esos retos, el cual plantea etapas de participación ciudadana, redacción de anteproyectos, las bases de una política hídrica de largo aliento, los pilares de un marco institucional para dicha política, y un plan de inversión en infraestructura hídrica con horizonte en 2050.
La severidad de esta crisis ya se aprecia en las empresas y productores que la están enfrentando, y exige sentido de urgencia de parte de las instituciones públicas y de gobierno. En un año tan complejo como éste —marcado por proceso constituyente, conflictividad social, polarización política e incertidumbre económica— no será fácil darle a este problema la prioridad que merece. Resulta paradójico que, tal vez como ninguno de esos otros temas, éste sea realmente clave para nuestras perspectivas de desarrollo.
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Fuente: Diario Financiero, Miércoles 05 de Febrero de 2020
La emergencia hídrica como prioridad país
DIARIO FINANCIERO – La Mesa Nacional del Agua fue convocada a principios de octubre del año pasado por el Presidente Piñera para generar estrategias de cara a la severa crisis por escasez de agua que afecta al país. En esa fecha, previa al estallido del conflicto social, la emergencia hídrica —la más grave en varias décadas— era una prioridad nacional que llenaba titulares y noticieros.
Un mes antes, la crisis había sido puesta en perspectiva en un preocupante Informe Nacional de Disponibilidad Hídrica del propio gobierno, y un amplio espectro de actores políticos y de la sociedad civil pedía medidas para enfrentarla en lo inmediato, a la vez que políticas de largo plazo para estar mejor preparados de cara al futuro. Lamentablemente, los sucesos de octubre desplazaron de la discusión pública la dramática realidad de la falta de agua en muchas zonas del país, que sin embargo continúa hasta hoy.
Esta instancia de carácter público-privado, luego de un proceso de intercambio y consulta con una gran diversidad de actores, identificó 12 ejes temáticos que ordenó en torno a tres grandes desafíos: seguridad hídrica; calidad de las aguas y ecosistemas relacionados; y marco legal. Realizado ese ejercicio, la mesa propone un cronograma durante 2020 para comenzar a abordar esos retos, el cual plantea etapas de participación ciudadana, redacción de anteproyectos, las bases de una política hídrica de largo aliento, los pilares de un marco institucional para dicha política, y un plan de inversión en infraestructura hídrica con horizonte en 2050.
La severidad de esta crisis ya se aprecia en las empresas y productores que la están enfrentando, y exige sentido de urgencia de parte de las instituciones públicas y de gobierno. En un año tan complejo como éste —marcado por proceso constituyente, conflictividad social, polarización política e incertidumbre económica— no será fácil darle a este problema la prioridad que merece. Resulta paradójico que, tal vez como ninguno de esos otros temas, éste sea realmente clave para nuestras perspectivas de desarrollo.
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Fuente: Diario Financiero, Miércoles 05 de Febrero de 2020