EL MERCURIO – Complejo. Con esa palabra se puede resumir el Diseño Urbano Alameda Providencia (DUAP), proyecto que consiste en mejorar la avenida principal de la capital y que, pese al tiempo que ha transcurrido desde su anuncio, aún no logra concretarse.
Aunque en 2015 fue adjudicado el contrato para llevar a cabo la iniciativa, problemas en el desarrollo de los estudios atrasaron el avance en su ingeniería.
Esa demora causó que el proyecto se viera reducido y que, finalmente, de los cuatro tramos en los que consistía -que abarcaban intervenciones en la Alameda desde Pajaritos hasta Tobalaba-, solo el “0” pueda ser ejecutado.
“Sentimos que es un proyecto en el que, con un esfuerzo importante, solo en el tramo ‘0’ podríamos iniciar una licitación el próximo año”, dice Karla Rubilar, intendenta Metropolitana.
Este tramo consiste en la desnivelación del cruce de Alameda-Pajaritos-Ruta 68 mediante la construcción de tres túneles, dos a Maipú y uno a esa autopista, además de otros trabajos como la inclusión de ciclovías. Corresponde solo a un kilómetro del total de 12 que contempla el proyecto completo.
Rodrigo Delgado, alcalde de Estación Central, afirma que “es desilusionante, porque esperábamos que existiera un real avance en la ejecución”.
Hoy, en vista del nulo progreso, el municipio buscará realizar mejoras al eje: “Nos incorporamos al proyecto de Recuperación de Barrios Patrimoniales y eso nos permitió ingresar algunos polígonos de la comuna para poder invertir, como en el casco histórico, que está desde la avenida Exposición”, plantea el edil.
La alcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei, sostiene que el diseño del proyecto desde su origen “no era de nuestro agrado porque afectaba la calzada y a nuestros peatones; no mejoraba la movilidad”.
Por ello, anuncia “un plan completo para que nuestro peatón viva mejor, que involucra al eje central de Providencia, para hacer más grata la calzada”.
Mientras, el alcalde de Santiago, Felipe Alessandri, apunta a que se debe revisar el diseño del proyecto en su tramo “para que vaya en sintonía con nuestro Plan Integral de Movilidad y finalmente se convierta en una arteria donde converjan distintas formas de transporte sostenible”.
Factores económicos
De acuerdo con la intendenta, hoy el problema principal es el financiamiento. Esto porque aunque el gobierno regional aportará $7.800 millones; los $37 mil millones del Plan Maestro de Transporte Público Metropolitano, administrados por el Ministerio de Transportes, no se incluyeron en el presupuesto de este año.
Además, se necesita distribuir los $7.800 millones que entregará Las Condes por una compensación que le hizo al Ministerio de Obras Públicas (MOP).
Por otra parte, en la Dirección General de Concesiones del MOP -que debe desafectar los primeros 520 metros de la Ruta 68 para ser intervenida- explican que ya “se han iniciado todos los trámites administrativos que permitirán en un futuro próximo dar inicio al proyecto”.
Para José Luis Domínguez, subsecretario de Transportes, una de las mayores dificultades ha sido la cantidad de organismos “que han intervenido en el desarrollo de los estudios y diseños”. A eso, dice, se suman las restricciones físicas en el eje que impiden lograr diseños viales “acordes a lo que se pretendía lograr originalmente”.
Agrega que, sin embargo, por cuenta de la cartera, se analiza “realizar mejoras a las pistas de buses”, lo que permitiría “pensar en consolidar una ciclovía de alto estándar a lo largo de la Alameda”.
Fuente: El Mercurio, Domingo 26 de agosto de 2018