ESTRATEGIA – El 5G es mucho más que una tecnología de comunicaciones, ya que con su llegada se abrirán un sin fin de posibilidades para que las personas puedan tener nuevas experiencias de conectividad y transformar la economía de los países. Ya no serán solo personas conectadas sino que habrá cosas e industrias conectadas entre sí, junto con nuevos usos de esta tecnología que aún ni imaginamos.
La capacidad de trasferencia de datos es uno de los aspectos clave y más conocidos que traerá el 5G. Así, en el ámbito del infoentretenimiento y a modo de ejemplo, una persona podrá ver en línea películas en 4K sin inconvenientes, ya que la velocidad llegará hasta los 10 gigabits por segundo (Gbs) desde un promedio actual de 25 Megabits por segundo. Aun más, se podrá contar con esta conexión en movimiento, sin problemas, ya que las pruebas realizadas por Ericsson han mostrado que sus radios base de 5G (antenas) pueden trakear terminales a velocidades de hasta 300 Km/h.
La mayor capacidad disponible también permitirá poner fin a la saturación de la red en casos de concentraciones de personas en estadios o conciertos. De hecho, Ericsson y MTS hicieron un despliegue de tecnología Massive MIMO, que se considera una transición del 4G al 5G, durante el mundial de Rusia, ampliando la eficiencia del espectro multiplicando la capacidad de la red por cuatro.
No obstante, el aspecto que se considera clave en la tecnología 5G es la reducción de la latencia. La disminución de este retraso en la transmisión permitirá hacer realidad un gran número de aplicaciones, en distintos ámbitos. La operación de equipos a distancia, en forma segura y con distintos fines es uno de los usos que cobra más fuerza. Estas posibilidades incluyen vehículos en minería, robots de rescate o de desactivación de explosivos, la operación de vehículos de transporte público, teleconducción de drones de distribución o en la telemedicina, la realización de cirugías a distancias gracias a la operación de equipos robotizados.
Julio San Martín, Vicepresidente de Marketing y Estrategia de Ericsson para Sudamérica, sostiene que ”con el 5G, al 2023, aumentará 8 veces el tráfico de datos móviles; con lo que se podrán conectar dispositivos con un consumo de energía extremadamente bajo, las batería durarán 4 veces más y habrá un uso de recursos muy pequeño en la red. Por ello, Ericsson estima que esta tecnología de quinta generación transformará la forma en que nos relacionamos y trabajamos, de una forma que aún es dificil de dimensionar”.
El Internet de las Cosas (IOT)es otro ejemplo. Esta tecnología se basa en un concepto de ecosistema de servicios interconectados, que en el caso de los Smart Home (casas inteligentes) permite instalar sistemas para controlar luces, cámaras de seguridad, audio, video en los hogares través de una aplicación en el celular. Aún más, no se trata solo de monitorear nuestros hogares sino de controlarlo y que éste realice procedimientos autónomamente, tales como activar aspersores en caso de detección de humo o responder a la llamada del timbre a través del smartphone y por video, a mucha distancia.
En el ámbito del IoT, otro caso de uso tiene que ver con las primeras pruebas que está desarrollando Ericsson en Suecia. Consiste en la implementación de un ecosistema que conecta automóviles, carreteras y ciclistas, para proveerles información en tiempo real. De este modo, ante la existencia de zonas de peligro que detecte un auto, se envía la alerta a todo el ecosistema. Algo similar sucede ante el riesgo de colisión entre autos o de atropello a un ciclista, donde se puede disminuir el riesgo gracias a la interacción entre dispositivos y sin intervención humana.
Fuente: Estrategia, Martes 31 de julio de 2018