EL MERCURIO – El Ministerio de Obras Públicas (MOP) está reactivando un proyecto -de origen parlamentario- que en el sector sanitario ha sacado ronchas en los últimos años. Especialmente cuando se comenzó a conocer a fines de 2016, pues en ese entonces consideraba eliminar la rentabilidad mínima de las firmas del rubro.
Hoy ese cambio puntual no sería prioritario dentro de esta reforma a la industria sanitaria, pero sí lo son otros que exigirán mayor inversión de las empresas en infraestructura para enfrentar contingencias derivadas de fenómenos ligados al cambio climático, como inundaciones y sequías. Asimismo, se evalúan ajustes a los negocios no regulados del rubro como sería la gestión integral de los líquidos industriales residuales.
El ministro de Obras Públicas, Juan Andrés Fontaine, recordó que hace unos días -el 13 de junio- esa cartera y la Comisión de Obras Públicas del Senado acordaron crear una mesa técnica para modernizar la Ley de Servicios Sanitarios, que en una primera instancia analizará varias posibles modificaciones al sector en un plazo de 90 días prorrogables.
“Vamos a buscar cómo incorporar nuevas ideas para tener un sistema de regulación de la industria sanitaria que se haga cargo de los desafíos de mejor calidad para las personas y una red de servicios sanitarios que sea más resiliente, más segura frente a los embates de la naturaleza”, comentó Fontaine, quien participó ayer en un foro organizado por el Consejo de Políticas de Infraestructura (CPI).
El ministro agregó que “uno de los aspectos a discutir es hasta dónde corresponde que las propias sanitarias asuman la responsabilidad de la evacuación de las aguas lluvia, pues eso no es así hoy, ya que está en manos del Estado, en la Dirección de Obras Hidráulicas”.
Sobre esto último, el superintendente de Servicios Sanitarios (SISS), Ronaldo Bruna, explicó que el tema de las aguas lluvia debe ser abordado con “una mirada de cambio climático y no solo pensar en conducirlas hacia el mar para evitar que inunden ciudades, sino también que se puedan inyectar para recargar acuíferos”.
Bruna indicó que los ajustes a las rentabilidades no están dentro de las prioridades de los cambios al sector.
“El marco regulatorio ha funcionado bien”
El presidente de la Asociación Nacional de Empresas de Servicios Sanitarios (Andess), Víctor Galilea, comentó que “lo medular de nuestro marco regulatorio ha funcionado bien”. Pero admitió que “hay aspectos perfectibles, por ejemplo, el cambio climático debe ser considerado a la hora de planificar inversiones y gestión”.
Galilea añadió que el modelo establecido para este sector ha permitido que desde el 2000 las inversiones de la industria sumen US$ 6.700 millones, dejando a Chile a la par de países desarrollados en términos de cobertura, continuidad y calidad de servicio de agua potable, alcantarillado y tratamiento de aguas servidas.
Asimismo, señaló que otro tema que debe abordarse son las mayores exigencias ciudadanas.
Fuente: El Mercurio, Miércoles 27 de junio de 2018